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¿Qué sentimiento te genera esta imagen? Chromostereopsis es uno de los fenómenos ópticos más llamativos. Sin embargo, no todos pueden percibir esa sensación flotante del color rojo, ante un azul que está de fondo…
Última actualización: 14 de mayo de 2022
Chromostereopsis es una ilusión visual en la que experimentamos una repentina sensación de profundidad cuando se combinan los colores rojo y azul. Es uno de los fenómenos óptimos más fascinantes. De hecho, si por algo es actual es por la repercusión que tiene con el uso de las pantallas.
Se ha descubierto que con el uso de teléfonos móviles y ordenadores, la ilusión de profundidad es más intensa. Basta comprobarlo encerrándonos en un cuarto oscuro. Abrimos esta imagen en un dispositivo electrónico, subimos el brillo y podemos percibir incluso un falso movimiento de la imagen.
El cerebro nos engaña -lo hace muchas veces-, haciéndonos creer que un simple dibujo adquiere repentinamente características tridimensionales. Esta aberración cromática es el resultado de la refracción diferencial de la luz en relación con su longitud de onda. Lo interesante es que esta característica se conoce desde la antigüedad.
Tanto es así que muchas vidrieras de las catedrales más antiguas ya buscaban la combinación de ciertos colores para crear esa sensación, esa experiencia única -y sobrenatural-.
Cuando el rojo y el azul se ven uno al lado del otro en un ambiente oscuro, tenemos la sensación de que el rojo flota y se destaca sobre el azul.
Hay personas que no experimentan el fenómeno de la cromostereopsis.
Chromostereopsis: qué es y por qué la experimentamos
Si hay un libro fascinante sobre el universo del color, sus efectos y su naturaleza, ese es Zur Farbenlehre (Teoría de los colores) de Johann Wolfgang von Goethe. Fue escrito en 1810 y ya en esa época, el célebre poeta, dramaturgo y naturalista alemán destacó algo: el azul es un color que retrocede y el rojo es un color que destaca. Además, juntos parecen «perforar» el órgano de la vista.
Algo pasa cuando combinamos estos dos colores. Y esto lo sabían los grandes artistas desde la antigüedad. De hecho, es común ver como muchos vitrales y también pinturas combinan el rojo y el azul para generar profundidad y movimiento al mismo tiempo. Ahora bien, fue en 1860 cuando tuvimos la primera explicación científica del fenómeno de la cromostereopsis.
Cornelius Donders, un renombrado oftalmólogo holandés, sugirió que cuando la retina capta el color rojo, necesita más tiempo para acomodarlo y procesarlo. Si aparece junto al color azul, estará en segundo plano, mientras que la tonalidad roja estará al frente.
Ahora bien, existen muchas más teorías que explican este singular fenómeno que, en realidad, está presente en más ámbitos de los que pensamos.
El secreto está en la fóvea
El fenómeno de la cromostereopsis no sería posible sin la fóvea. Es una zona de la retina donde se concentran los rayos de luz y podemos procesar los colores. Sin embargo, esta parte del ojo se encuentra en la mácula lútea y debido a su posición/orientación en ambos ojos, no termina de captar toda la gama de colores con la misma precisión.
El azul y el rojo están en los extremos opuestos del espectro de luz.. Esto hace que cada longitud de onda se enfoque de manera diferente, por lo que el rojo siempre tarda más en procesarse y siempre estará por delante. El azul estará detrás, dándonos un fenómeno óptico de profundidad.
Sin embargo, es importante señalar que hay personas que son «ciegas» al fenómeno de la cromostereopsis. Los mecanismos de por qué sucede esto no están claros. Sin embargo, y este dato también es curioso, hay muchas personas que no captan buena parte de las ilusiones visuales; sin embargo, esto no condiciona sus vidas. De hecho, a menudo ni siquiera son conscientes de que tienen esta anomalía única.
El espectro de luz de los colores llega a diferentes planos del ojo; sin embargo, no todos estos planos coinciden con el plano de la retina y la fóvea, que es la parte que los procesa.
Chromostereopsis es parte del mundo digital y en la naturaleza
Estudios, como los realizados en la Universidad de Letonia, revelan cómo el fenómeno de la cromostereopsis es algo habitual en nuestros medios digitales. Es más, la luz de los teléfonos móviles y los ordenadores intensifica mucho más esa experiencia perceptiva. Y lo que es mejor, los diseñadores y las grandes empresas tecnológicas lo saben y tratan de aprovecharlo.
Pensemos por un momento en todos esos medios y aplicaciones que combinan rojo y azul. El mundo de los videojuegos, por ejemplo, utiliza constantemente este efecto óptico, así como los escenarios en programas de televisión. Estos dos tonos nos acompañan constantemente en la publicidad.
Por otro lado, es fascinante saber que la cromostereopsis es un recurso que la biología ha integrado al mundo animal. Las mariposas han desarrollado patrones de círculos rojos en sus alas como mecanismo de defensa contra los depredadores.. ¿Cómo? Esa tonalidad y esos esquemas de color sugieren la forma de un ojo (un ojo que destaca por su tonalidad). Esto mantiene alejados a los enemigos potenciales.
Para concluir, estamos ante un tipo de aberración cromática o fenómeno óptico de gran impacto que forma parte de nuestro día a día, tanto natural como tecnológico e incluso artístico. Aquellos que puedan percibirlo, disfrútenlo y tomen conciencia ahora de cuántos lugares se usan estos dos tonos juntos.
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